Arregla tu RDL: Errores Comunes y Cómo Corregirlos
El peso muerto rumano es un cambio total para tu cadena posterior—¡solo evita estos errores comunes para levantar de manera más segura y fuerte!

El peso muerto rumano (RDL) es uno de esos ejercicios que hace el trabajo. Trabaja los isquiotibiales, glúteos y la parte baja de la espalda como un campeón, construyendo una base de fuerza que puedes llevar a través de todo tu programa de entrenamiento. Pero aquí está el truco: si no eres cuidadoso con tu forma, es posible que no estés trabajando los músculos correctos o, peor aún, podrías lesionarte.
Así que, vamos a desglosar los errores más comunes del peso muerto rumano y cómo corregirlos—sin más juegos de adivinanza. Estamos aquí para ayudarte a hacer tus levantamientos más fuertes, seguros y efectivos. ¿Listo? Vamos a sumergirnos.
1. Redondear la Espalda: El Gran No-No
Uno de los errores más grandes que se cometen con el peso muerto rumano es redondear la espalda. Ya sea por mala postura, fatiga o simplemente no saberlo, redondear la columna pone mucha tensión en la parte baja de la espalda. Con el tiempo, esto puede llevar a una lesión, que es lo último que quieres.
Por qué pasa esto: Cuando comienzas el movimiento, es fácil dejar caer el pecho hacia adelante y redondear la espalda, especialmente si estás levantando pesado o apurado en la serie.
Cómo corregirlo
Piensa en jalar tu pecho hacia arriba y los hombros hacia atrás todo el tiempo. Una buena regla es imaginar un hilo atado a tu pecho, tirando de ti hacia arriba. Esto ayudará a mantener la espalda recta, manteniendo la presión donde debe estar: en tus glúteos e isquiotibiales.
Consejo útil: Una buena manera de comprobar si tu espalda está redondeada es usando un espejo o grabándote. Te sorprenderá cuántas veces se cuela un redondeo sin que lo sientas.
2. Doblar Demasiado las Rodillas: Es un Hinge de Cadera, No una Sentadilla
Cuando haces un RDL, recuerda que esto no es una sentadilla. El objetivo es hacer un hinge de cadera, no doblar las rodillas como si fueras a hacer una sentadilla. Mucha gente comete este error, lo que cambia el enfoque de los isquiotibiales y glúteos hacia los cuádriceps.
Por qué pasa esto: Las personas a menudo confunden el peso muerto rumano con un peso muerto tradicional o una sentadilla, que sí requieren un mayor doblado de las rodillas. Pero en el RDL, eso no es lo que buscamos.
Cómo corregirlo
Mantén las rodillas suaves—no bloqueadas, pero tampoco demasiado dobladas. El movimiento debe venir de tus caderas empujando hacia atrás, no de las rodillas doblándose hacia adelante. Imagina que estás tratando de tocar la pared detrás de ti con tu trasero mientras mantienes la barra cerca de tu cuerpo. Esto ayudará a activar tu cadena posterior.
Consejo útil: Si sientes que tus cuádriceps están haciendo la mayor parte del trabajo, revisa la posición de tus rodillas. Ajustar la flexión y enfocarte realmente en las caderas puede hacer una gran diferencia.
3. Olvidar Activar el Core: La Estabilidad Empieza Aquí
Tu core es tu base. Sin activarlo, no solo arriesgas una mala postura, sino que también haces más difícil que tus isquiotibiales y glúteos se activen completamente. Un core débil o desactivado pone estrés innecesario en la parte baja de tu espalda.
Por qué pasa esto: Es fácil olvidarse del core cuando te concentras en levantar pesas pesadas. Pero el core es el centro de poder de tu cuerpo y necesita estar bien activado durante este movimiento.
Cómo corregirlo
Antes de levantar la barra, toma una respiración profunda y activa tu core como si alguien fuera a golpearte en el estómago. Mantén esa tensión durante todo el levantamiento; esto protegerá tu espalda baja y ayudará a mantener la trayectoria de la barra en su lugar.
Consejo útil: Si tienes problemas para activar tu core, prueba hacer algunos planchas de pie o ejercicios de "dead bugs" antes de levantar. Activar tu core fuera del RDL te ayudará a encontrar esa tensión más rápido cuando sea el momento de levantar.
4. Extender Demasiado el Rango de Movimiento: Deja de Bajar Demasiado
El RDL no requiere que toques el suelo. Muchos levantadores bajan la barra demasiado durante el descenso, pensando que esto les dará un mayor estiramiento en los isquiotibiales. Si bien puede sentirse como si estuvieras obteniendo un estiramiento más profundo, en realidad estás aumentando el riesgo de redondear la espalda y perder tensión.
Por qué pasa esto: La flexibilidad está bien, pero el objetivo es mantener el control y mantener la tensión en los músculos objetivo. Si bajas demasiado, tu forma se romperá.
Cómo corregirlo
Baja solo lo que puedas mientras mantienes la espalda recta. Esto podría significar detenerte a la altura de la rodilla o justo por encima de las rodillas. Enfócate en el hinge de cadera, no en qué tan bajo puedes llegar. Tus isquiotibiales seguirán recibiendo un estiramiento excelente, incluso sin tocar el suelo.
Consejo útil: Si eres flexible, puede ser difícil resistir la tentación de bajar más. Pero recuerda, el objetivo es la calidad sobre la cantidad. No sacrifiques la forma por la profundidad.
5. Dejar Caer la Barra Demasiado Rápido
Es tentador dejar que la gravedad haga su trabajo y dejar caer la barra cuando llegues al fondo. Pero si dejas que la barra caiga rápidamente, te estás perdiendo de beneficios clave como la activación muscular y el control. El peso muerto rumano se trata de un movimiento controlado y lento—tanto hacia arriba como hacia abajo.
Por qué pasa esto: Las personas a menudo tienen prisa por terminar la serie o se concentran demasiado en levantar el peso. Pero el descenso es tan importante como el ascenso.
Cómo corregirlo
Controla el descenso, como si estuvieras tratando de estirar tus isquiotibiales y controlar el peso hasta abajo. No dejes que la barra caiga de golpe. Hazlo de manera deliberada y lenta; esto ayudará a construir fuerza en los músculos correctos y protegerá tus articulaciones.
Consejo útil: Si estás luchando por controlar el descenso, prueba bajar el peso un poco y practicar hacer el movimiento más lento. ¡Sentirás la diferencia!
6. Levantar Demasiado Peso
Es fácil caer en la trampa de pensar que necesitas levantar pesos pesados para ver resultados. Pero aquí está el trato: levantar demasiado peso antes de haber perfeccionado la técnica es un boleto directo hacia las lesiones. El progreso lleva tiempo y es mejor construir fuerza gradualmente que lanzarse a pesos pesados demasiado rápido.
Por qué pasa esto: El levantamiento por ego es real. Pero el progreso toma tiempo, y es mejor construir fuerza poco a poco que lanzarse a pesos pesados demasiado rápido.
Cómo corregirlo
Comienza con pesos más ligeros y concéntrate realmente en dominar la forma primero. Una vez que tengas una técnica sólida, puedes aumentar gradualmente el peso. Progresar lentamente es la ruta más segura—y más inteligente.
Consejo útil: Usa un peso que te desafíe, pero que no comprometa tu forma. Si no puedes mantener la postura, está demasiado pesado.
7. No Llevar el Levantamiento Hasta el Final
Es fácil detener una serie cuando ya no lo sientes, pero podrías estar dejando ganancias de fuerza serias atrás. Si no empujas hasta el final, no estás trabajando lo suficiente tus músculos para realmente desafiarlos.
Por qué pasa esto: A veces puedes contenerte porque tu agarre se agota primero o no estás en el estado mental para empujar más. O tal vez te preocupa que la forma se rompa al final de la serie. Cualquiera sea la razón, detenerte temprano podría costarte progreso.
Cómo corregirlo
Empújate hasta el final—pero aquí está el truco: usa lifting straps para reducir la fatiga en el agarre. El agarre es lo primero que falla, pero tus músculos pueden seguir trabajando mucho después de que tus manos empiecen a resbalar. Los lifting straps te ayudarán a concentrarte en los isquiotibiales y glúteos, en lugar de dejar que tu agarre te detenga.
Consejo útil: Si sientes que tu agarre está fallando, no dudes en usar algunos lifting straps. Te permitirán terminar tu serie con fuerza, concentrándote completamente en los músculos de la cadena posterior que realmente necesitan el trabajo.
8. No Sentir el Estiramiento
Si estás haciendo todo bien y aún no sientes el RDL en tus isquiotibiales y glúteos, algo no está funcionando. El peso muerto rumano debe ser todo sobre sentir el estiramiento y la activación en la cadena posterior. Si no lo sientes, es probable que tu forma esté mal.
Por qué pasa esto: A veces estamos tan enfocados en completar el levantamiento que olvidamos concentrarnos en dónde debemos sentir el trabajo.
Cómo corregirlo
Hazlo más despacio, respira y realmente concéntrate en sentir el estiramiento en los isquiotibiales durante el descenso. Intenta empujar las caderas más atrás y mantener la barra lo más cerca posible de tus piernas. Cuanto más te concentres en el músculo que estás trabajando, mejores serán los resultados.
Consejo útil: Si no sientes trabajar tus isquiotibiales, revisa tu hinge de cadera. Podrías estar doblando las rodillas demasiado o no empujando las caderas lo suficiente hacia atrás.
Para Concluir
El peso muerto rumano es un ejercicio clave para construir fuerza en la cadena posterior. Pero, como cualquier ejercicio, solo es efectivo si lo haces bien. Evitar estos errores comunes y enfocarte en perfeccionar tu forma te ayudará a desarrollar isquiotibiales y glúteos más fuertes y poderosos.
Así que, mantén el pecho erguido, haz el hinge de cadera correctamente y controla el movimiento. Una vez que lo consigas, tu cadena posterior te lo agradecerá, y estarás aplastando tus levantamientos en poco tiempo.